sábado, 22 de octubre de 2011

Leonard Cohen o de la poesía





 Morning sun (1952) de Edward Hopper

Sentir es lo que hacemos, sobre todo, al leer los poemas y al escuchar la música de Leonard Cohen, que ha recibido el Premio de las Letras. Sentimos la fortaleza de una obra hecha con constancia, talento y sinceridad. Leer y escuchar a Cohen es, en efecto, sentir la fuerza de quien escribe y canta directamente para los corazones; sentir la sincera afirmación de que son poetas como Lorca o Machado los que han iluminado sus dudas y sus certezas más profundas; sentir también el compromiso de quien, sin olvidar su querida tierra canadiense, ni a sus raíces ni antepasados, se adentra en la naturaleza humana, buscando respuestas, soluciones, una reconciliación que aproxime nuestros corazones, tratando de conseguir que la poesía y la música se conviertan para siempre en un lugar de encuentro y de entendimiento fraternal. 
“No es por deciros nada/ sino para vivir eternamente/ por lo que escribo esto”, nos dice Cohen. Así, con irónico y agudo sentido del humor, con destellos de luz y de imaginación portentosa, sin poder remediar la abundancia y la riqueza de ideas, de palabras, de notas, de cantos, así vive Leonard Cohen. Varias generaciones leemos y escuchamos sus creaciones con admiración y respeto, tarareando sus canciones, que forman parte ya de la historia de la música y de nuestra memoria colectiva. Reconocemos su gran obra y le damos las gracias por su coherencia, por su belleza; por no haber renunciado nunca a todo aquello que lo ha convertido en un artista admirado y admirable, un amigo con el que recorrer los senderos de la vida y de la fuerza imparable del amor. 
Este es un fragmento extraído de las palabras pronunciadas por el Principe de Asturias durante el acto de entrega de los Premios Principe de Asturias 2010 entregados en el Teatro Campoamor de la Ciudad de Oviedo el día 21 de octubre de 2011 .
Aquí el enlace al video de su elocuente discurso  y en este otro enlace su discurso publicado en el País.com


Un poema de L.Cohen.


Me gustaría leer
uno de los poemas
que me arrastraron a la poesía.
No recuerdo ni una sola línea,
ni siquiera sé dónde buscar.
Lo mismo
me ha pasado con el dinero,
las mujeres y las charlas a última hora de la tarde.
Dónde están los poemas
que me alejaron
de todo lo que amaba
para llegar a donde estoy

desnudo con la idea de encontrarte. 


Una maravillosa canción









Suzanne te lleva a su escondite, al lado del río.
Puedes oir las barcas pasar de largo.
Puedes pasarte toda la noche a su lado.
Y sabes que está medio loca,
pero ese es el motivo por el cual estás allí.
Y te da té, y naranjas
de la China.
Y cuando tratas de decirle
que no tienes amor para ofrecerle,
te coge y te mece en sus brazos,
dejando que sea el río el que conteste
que siempre has sido su amante.
Y quieres viajar con ella.
Quieres viajar a ciegas.
Y sabes que confiará en ti
por haber tocado su cuerpo perfecto con tu mente.

Y Jesús era un marinero
cuando caminó sobre el agua.
Y pasó mucho tiempo mirando
desde su solitaria torre de madera.
Y cuando supo con certeza
que sólo los que se ahogaran podrían verle
Dijo: -Todos los hombres serán marineros,
hasta de que el mar los libere.
Pero él mismo estaba perdido
antes de que el cielo se abriera.
Abandonado, casi humano,
se hundió bajo tu sabiduría como una piedra.
Y quieres viajar con él.
Quieres viajar a ciegas.
Y sabes que quizá confiarás en él
por haber tocado tu cuerpo perfecto con su mente.

Ahora, Suzanne toma tu mano,
y te lleva hasta el río.
Lleva puestos unos trapos y plumas
sacados de la ventanilla del Ejército De Salvación.
Y el sol cae como la miel
sobre nuestra chica del puerto.
Y te muestra donde mirar
entre la basura y las flores.
Hay héroes en las cloacas,
y niños por la mañana,
inclinándose por amor.
Y lo seguirán haciendo siempre,
mientras Suzanne sostiene el espejo donde se mira.
Y quieres viajar con ella.
Quieres viajar a ciegas.
Y sabes que confiará en ti
por haber tocado tu cuerpo perfecto con su mente.





Una imagen del hombre






Un saludo coheniano.


Ejercicio 5:


De una forma poética intenta explicar en qué crees que piensa la mujer del cuadro 
Morning sun de Edward Hopper que puedes observar al inicio de esta entrada.
¿Qué ocurriría si tú entraras en la habitación en este mismo momento?


6 comentarios:

  1. Beatriz Gómez 2ºD23 de octubre de 2011, 5:20

    Rayos de claridad me visten,
    brisas perfumadas me llevan,
    una ciudad repleta de sensaciones complejas.
    Bullicios cargan secreto,
    indescifrables secretos,
    dando una tranquilidad
    que la noche jamás verá.
    Pero unos pasos cercanos,
    irrumpieron aquel silencio extraño,
    alguien había llegado,
    debería haberme alegrado,
    por fin,
    ya estaba aquí.
    Pero aquella dulce sensación,
    que desde la ventana de mi habitación
    hacía parar el tiempo,
    era para solo un momento.

    ResponderEliminar
  2. Mar delgado alcázar23 de octubre de 2011, 8:31

    luz y clarídad en la
    mañana, siento al mirar
    por mi ventana,oigo el
    píar de los pajarillos.
    lentamente pasa el tiempo,
    y me quedo dormida en mis
    pensamientos.Una vocecita
    me susurró al oido,en aquella
    mañana de primavera,despierta
    y asomate a la ventana pequeña
    amiga.
    Observa el amanecer,tan colorido
    y pinta un hermoso cuadro con
    los colores del olvido.

    ResponderEliminar
  3. GLORIA RAMOS DIAZ 2ºD

    Estando en un lugar, lejos de mi tierra, en este frio invierno,me encuentro aprovechando los ultimos rayos de sol de un maravilloso atardecer.

    Estando en un lugar, lejos de mi tierra, aislada de lo incomprendible, me siento arropada por mi soledad.

    Estando en un lugar, lejos de mi tierra, en el horizonte veo las montañas de mi pueblo, del pais de donde pèrtenezco.

    Sueño con el día que vuelva a disfrutar de mis maravillosos momentos de soledad, viendo esos montes y viñas, y no confundienolos con los pequeños arboles que veo y los edificios que quiero confundir en este momento con esos maravillosos montes.

    ResponderEliminar
  4. Alejandro Ballester Pérez5 de noviembre de 2011, 10:47

    Una mañana soleada,
    recién levantada,
    miraba por la ventana,
    quedé asombrada,
    y a la vez recordaba,
    cuando mi madre me aropaba,
    igual que lo hacía,
    aquella madre con su cría.
    ¿Donde estas madre mía?
    necesito tús caricias,
    para sentirme arropada,
    tús palabras y miradas,
    como cuando era una cría.

    ResponderEliminar
  5. Lidia Simón Iribarne 2ºB11 de noviembre de 2011, 7:25

    Una mañana soleada y alegre el sol brillaba cuando de repente me vino a la memoria una imagen horrorosa en la que sentía mucho miedo y a la vez asco.
    Como pueden ser los hombres asín y utilizar a las mujeres como trapos sucios-pensaba.
    Me pongo en el lugar de esa mujer avergonzada y dolorida.
    Pienso en como un día tan soleado y brillante puede convertirse en un día frío y oscuro.

    ResponderEliminar
  6. Carolina Rodríguez Jiménez12 de noviembre de 2011, 11:45

    Ese dia por la mañana
    me despertaba cuando el alba
    mire ala ventana
    mientra que pensaba,
    ¿Que aria esete día?
    ¿Que pasaría?
    Tenía un buen pesentimiento
    Me levantecon energía con ganas de comermen el mundo.
    Me pare un segundo, y dije ¡halla voy!

    ResponderEliminar